LA MAYOR TRAMPA DE NUESTROS DIAS
La mayor trampa de nuestros días que más engulle almas al infierno es el pecado de presunción, es decir, esperar lo que Dios no ha prometido, la salvación sin cumplir todos sus mandamientos, o en otras palabras, que la condenación eterna es sólo para los más criminales endurecidos, que es difícil perder el alma para …